Estás manejando un deportivo rojo dos puestos último modelo. Es de noche y llueve a cántaro desde hace más de seis horas. En buena parte de la ciudad se ha ido la luz y las telecomunicaciones no están funcionando. Cuando llegas a un semáforo, divisas que en la parada de autobús hay tres personas esperando, pero es más de media noche y el transporte público ya no trabaja más. Cuando te aproximas ves que se encuentra un viejo amigo tuyo que dos años atrás salvó tu vida de una muerte segura. A su lado está sentada una mujer anciana que se ve muy pálida, con escalofríos y una tos espantosa. No hay duda de que debe ir de inmediato al hospital o morirá. La tercera persona es el hombre (o mujer) de tu vida. Fue un flechazo a primera vista y sabes que si no aprovechas ese instante y la dejas ir, más nunca volverás a verla ni a conseguir otra persona igual. Entonces, tienes un solo puesto en carro, no puedes llevar sino a una persona ¿Qué haces?: (selecciona una sola opción)
- Te llevas al amigo que te salvó la vida
- Te llevas a la anciana para salvarle la vida
- Te llevas al hombre (o mujer) de tu vida
Solo una persona dejó las opciones en blanco y agregó una nota:
Yo le daría el carro a mi amigo para que llevara a la anciana a un hospital, y me quedarían en la parada de autobús junto a la mujer de mi vida.
En muchas ocasiones solemos pensar en blanco o negro, en bueno o malo, en si o no, en grande o pequeño, en gordo o flaco, en izquierda o derecha, es decir en dos dimensiones. Cuando mucho buscamos un punto intermedio o central, pero que de alguna manera siempre nos ubica en el medio de una línea recta imaginaria entre las dos alternativas extremas, de manera que seguimos pensando en dos dimensiones. Buscar más opciones se nos hace difícil, llegamos a una “zona cómoda” de la que nuestros pensamientos no desean salir. En realidad podemos ser más creativos cuando nos plantean un problema sin adelantarnos ninguna solución posible que cuando frente al mismo problema nos dan a escoger entre varias opciones. Entonces nos concentramos en cual de las opciones debe ser la más adecuada y nos olvidamos que quizás existe otro camino diferente a los ya planteados.